El Kundalini es un conjunto de técnicas que propician en los niños movilidad, fuerza, elasticidad y mucho más. Veamos con mayor detalle de qué se trata.
El kundalini es una práctica de técnicas proveniente de Asia, específicamente de la India. Los hindúes asocian el espiral del ADN con la serpiente; para ellos, este animal representa la energía del cosmos y consideran que está dentro de cada individuo.
Este deporte está representado gráficamente por una serpiente enrollada y adormecida en la base de nuestra columna
¿Es en verdad la energía del cosmos que existe dentro de cada individuo? Según los hindúes, sí. Pero eso también es uno de los principios del yoga, dirán algunos; y tienen toda la razón, porque el Kundalini es un tipo de yoga.
Se trata de un conjunto de ejercicios en los que se emplean diversas posiciones; y que a ti, como mamá, de seguro te sientan bien, sobre todo, cuando estás estresada y quieres descansar. Pero no solo es funcional para los adultos, ¿sabías que a los infantes les trae numerosos beneficios?
"Si le enseñamos mediatación a cada niños de ocho años, eliminaríamos la violencia en solo una generación" - Dalái Lama - Máximo dirigente tibetano y Premio Nobel de la Paz 1989
Conoce los 10 beneficios del Kundalini en los niños
Los chicos, por lo general, necesitan realizar deportes en los que pueden desarrollar y favorecer el cuerpo y la mente. Es por ello que, aquí señalamos las mejores ventajas de ejercitar esta técnica fundamentada en energías positivas:
- Expande sus conciencias, haciéndolos más grandes espiritualmente.
- Equilibra la mente, el cuerpo y las emociones.
- Mejora la postura (evitando futuros problemas de espalda).
- Las asanas (posiciones) fortalecen sus músculos y los hace más flexibles.
- El kundalini complementa los otros deportes, como la práctica del fútbol, baloncesto, ciclismo, patinaje, etc.
- Los relaciona con una buena y correcta alimentación.
- Es excelente para niños inquietos, pues los enseña a meditar.
- Acrecienta su desarrollo cerebral.
- Fomenta la creatividad, el compañerismo y la amistad.
- Incentiva el disfrutar de la vida, lo que a la larga propicia adultos sanos, inteligentes y alegres, por ende, más felices.
Edad apropiada
Después de leer lo anterior, seguro te estás preguntando: ¿A partir de qué edad puedo apuntar a mi hijo en las clases de kundalini? Y la respuesta es a partir de los 3 o 4 años, pues esta práctica se adapta a las necesidades de cada etapa de crecimiento.
El Kundalini estimula los sentidos y el movimiento
“Es distinto trabajar con niños de 7 u 8 años; edad en la que ya empiezan a desarrollar sus habilidades, están en pleno crecimiento, conocimiento o razonamiento y, por tanto, pueden responder a las correcciones, así como trabajar las visualizaciones”, explica Almudena Ovejero, profesora de Hatha Yoga, fundadora del Centro Universo Yoga.
Así mismo, Almudena añade que "el niño aprende un valor fundamental que lamentablemente se ha perdido mucho en nuestra sociedad, se trata del respeto. Como se trabaja por parejas o en grupos, ellos ponen en práctica el respeto hacia el otro. También enseñamos el respeto hacia el medio ambiente".
En conclusión, los niños que ingresan a este tipo de centros logran ser conscientes de su cuerpo y descubren para qué sirve cada parte de él. Dentro de la práctica, conocen que cada posición va acompañada de ejercicios de respiración, promoviendo la concentración para que aprendan a controlar sus pensamientos.
En definitiva, es una disciplina que les ayuda a despejar la mente, relajarse eliminado el estrés y los complejos; a su vez, los mantiene en calma a nivel espiritual, mental y corporal. Algo muy positivo que genera en su vida diaria, es que logran prestar mayor atención, por lo que se concentran más en los estudios.
La propuesta es para todos, el kundalini debería ser una práctica obligatoria en la enseñanza de nuestros niños, porque no solo beneficia su estado integral de salud, sino también fomenta la paz y el amor entre las personas.
