¿Preparados? Llega un nuevo integrante a tu hogar. Entérate aquí las claves de un recibimiento maravilloso para el hermano menor de la familia
El hermano menor significa para la mayoría de los padres una nueva oportunidad de experimentar las emociones de la crianza. Su llegada representa un momento de inigualable felicidad. Siendo así, el arribo del más pequeño de la familia no debe constituir un problema en las relaciones del hogar.
No obstante, la llegada del hermano menor produce cambios que, por lo general, afectan a los más pequeños. En este sentido, la reorganización ante la llegada de un nuevo bebé genera conflictos naturales en los hermanos mayores. Y, aunque quizás, los padres piensen que pueden manejar adecuadamente esta situación, pronto cambiarán de opinión.
"La infancia es una época maravillosa, en la que a los hermanos se les regala sarampión de presente de cumpleaños" - Peter Alexander Ustinov - actor, comediante, escritor y dramaturgo británico
¿Cuándo es conveniente anunciar la llegada del hermano menor?
La respuesta es sencilla: antes es mejor. Pero si se trata de un chico pequeño, lo adecuado es demorar un poco hasta que el embarazo sea visible. Un mar de preguntas es el resultado de la genuina curiosidad que tendrá el hermano mayor. Respuestas claras y sin rodeos es la clave.
Hacerlo partícipe de la preparación para la venida de su compañero más pequeño, hará más sencilla la adaptación. Por lo tanto, involucrarlo en los acomodos previos, tales como compra de ropa o arreglo de la habitación facilitará el cambio.
Él, debe ser un protagonista importante de este hecho tan relevante que ocurre en el ambiente familiar. Sé paciente, recuerda que las variaciones en el ritmo de vida suelen afectar a lo más pequeños del hogar.
¿Cómo manejar los celos?
Los celos fraternales entre hermanos es una actitud frecuente en las relaciones humanas. Ello es, tan antiguo como la rivalidad existente entre Caín y Abel, a la cual se le ha dado una connotación negativa. Sin embargo, todo es solo una percepción equivocada de la realidad.
El arribo del reciente miembro de la familia tendrá esta natural consecuencia llamada celos, en el comportamiento del primogénito
Igualmente, debemos entender que los celos es una conducta instintiva que busca mantener el apego afectivo hacia sus seres queridos. En tal sentido, ese sentimiento se debe considerar normal e inevitable en los niños. Lo mejor en estos casos es gestionar y acompañar este proceso. Asimismo, esto se logra con todo el tiempo y la atención posible que dediquemos al infante mayor.
Recomendaciones para el recibimiento del nuevo integrante
- Prepara con anticipación a todos los familiares. Especial atención con los hermanos.
- Adecúa antes del nacimiento el área que ocupará el niño. Recuerda no invadir los espacios propios de otros.
- Incluye a todos en la fase de crianza desde el primer momento. La participación es primordial.
- Evita las comparaciones entre el hermano menor y el mayor.
- No modifiques exageradamente la rutina familiar.
Por consiguiente, el apoyo y la comprensión son factores fundamentales para mantener la armonía ante el advenimiento del bisoño compañero. Finalmente, recuerda que los hermanos jugarán un papel fundamental. Por lo tanto, fomentar el respeto y el amor nos llevará a disfrutar del clima emocional que propicie el desarrollo sano de la familia.