La leche materna ayuda a desarrollar cognitivamente a los niños gracias a los nutrientes que contiene. Además, favorece el enlace emocional. ¿Cómo lo hace?
La leche materna cumple más que una función alimenticia. Esta incrementa de manera significativa el desarrollo del cerebro en los bebés. Ya se sospechaba y se habían hecho una serie de investigaciones acerca de tema. Sin embargo, no fue sino hasta que en la Universidad de Brown se dieron a conocer los resultados de su investigación que se confirmó tal hipótesis.
En dicho estudio se denotó cómo la mielina se incrementó en aquellos bebés que se alimentaron con leche materna exclusivamente, en comparación con los que tuvieron otros sistemas alternativos como fórmulas para lactantes.
"La lactancia materna es una forma de alimentación que comienza en el nacimiento con leche producida en el seno materno... forma inigualable de facilitar el alimento ideal para el crecimiento y desarrollo correcto de los niños" - Wikipedia.org -
La leche materna hace más inteligentes a los bebés
El desarrollo de la materia blanca (o sustancia blanca) en los bebés que son alimentados de manera exclusiva con leche materna es mayor que en aquellos que reciben otras alternativas. Dicho elemento lleva por nombre Mielina y es la que recubre las fibras nerviosas extensas que son las que se ayudan en la comunicación de información entre las regiones cerebrales.
A mayor mielina, mejor será la permeabilidad de las fibras y la información llegará de manera efectiva a los hemisferios. Entonces se puede establecer que es más probable que los bebés que cuenten con esta condición tengan mayor desempeño cognitivo que los que no. Así mismo, la prolongación de la lactancia materna estimula el crecimiento de las regiones del cerebro que se vinculan a la función motora.
¿Cómo influye la leche materna en el desarrollo cerebral?
Por ser rica en contenido graso y ácidos poliinsaturados del grupo omega 3 y 6, la leche materna desempeña un papel fundamental en el incremento de las membranas hormonales.
Además, la lactoferrina también está presente, que es la que contribuye a la absorción de hierro que es imprescindible para el transporte de oxígeno al cerebro.
La lactancia materna también actúa en las emociones
A la oxitocina se le conoce como la hormona del placer y también se encuentra presente en la leche materna. En la madre, ayuda a estimular la producción de esta y a crear una sensación de tranquilidad al momento de dar de lactar al bebé.
Uno de los mayores beneficios emocionales de amamantar a un bebé es crear un vínculo único que perdurará aunque pase el tiempo
Así mismo, se fortalece el vínculo madre e hijo y emocionalmente lo equilibra. Por esta razón, los pequeños sienten tranquilidad y una sensación de protección cuando están tomando pecho. La lactancia es un diseño preciso para ser aprovechado al máximo. Esto con la finalidad de que sus niños tengan un desarrollo cognitivo satisfactorio.